*Once niños del centro educativo Santa Teresita de El Retén recibieron por primera vez la Comunión en una bella y solemne ceremonia luego de la eucaristía en la iglesia San Juan Bautista.
Maira Candiek, se apresura y le dice a su pequeña hija Mariana Gutiérrez, que tranquila que solo falta peinarla para salir para la iglesia. Ella Mariana está ansiosa han sido días de prácticas, enseñanza y ensayos a fin de llegar a visitar a Jesús en el altar por segunda vez.
«Yo no me acuerdo del bautizo, pero de esta si me voy a acordar, le dice a su madre de manera inocente, Maira, sonríe y le da un beso en la frente. ! Listo ahora sí vamos, estás hermosa hija mía, ¡Dios está contento por esta vista a su casa! Le exclama antes de partir para la iglesia.
La Primera Comunión es la celebración de la Iglesia Católica donde el niño y la niña participan por primera vez en el Sacramento de la Eucaristía, recibiendo la Comunión. La Sagrada Comunión es la presencia de Jesucristo en la Eucaristía, donde le recibimos sacramentado bajo las especies del pan y del vino.

Mariana llega a la iglesia y se encuentra con sus otros compañeritos y amigos, los padres de ellos y otros familiares. La fiesta religiosa es impecable y cargada de una gran devoción.
A la primera que saluda Mariana es a Eliana Barros y luego con Isabel Blanco, Nayara Pertuz, Andreina Abellaneda, Nalchey Pérez, Jose Antonio Barrios, Andrea Calderón, Pablo Gómez, Sebastián Vizcaíno, y Nailea Moreno, todos ellos ya están listos para recibir a Jesús sacramentado.
La fecha de celebración 1 de octubre también es muy especial, se celebra el día de Santa Teresita, el mismo nombre de su centro educativo, la institución Santa Teresita, centro de enseñanza fundado hace ya 16 años por la profesora Teresa Quiñonez a quien los reteneros vieron partir de este mundo en el tiempo de pandemia, uno de los episodios más dolorosos del último tiempo en el pueblo.
«Este evento tan espiritual, se hace dos veces especial, ver a mi hija recibir el sacramento de la comunión y hacer homenaje a la memoria de la seño Tere, a quien tanto quisimos, admiramos y extrañamos hoy, su legado está en buenas manos, creemos que su sobrino Armando Bermúdez y su hermana Delvis Quiñonez, están haciendo las cosas bien en beneficio de la educación retenera», sostiene Maira Candiek.
Paz en la tumba de la seño Tere quien vive en el cielo y alegría en el corazón cristiano porque 11 de sus bellos hijos ahora están más cerca de Jesús aquí en la tierra.

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