Por: Luis Oñate Gámez
Hace exactamente un año cuando la pandemia no era tan severa, asesina y cruel con el pueblo del Magdalena, escribe unos párrafos haciendo memoria de ese pedazo inolvidable de canción vallenata cantada por Diomedes Diaz y digitada por Juancho Rois, hoy que me tropiezo con el texto gracias a Facebook, retomo y veo que estamos igual o peor, porque a diferencia de la emoción de la canción que inspira amor, la indisciplina y otras aristas lo que ha traído es muerte y dolor
Destino porqué nublas mis ojos
Destino porqué nublas mis ojos
Yo no sé cómo voy a vivir
Si a la mujer que quiero y adoro
No soy yo quien la hago sufrir
El pariente Alfredo Antonio, es mayor de 70 años y disfruta de una modesta pensión con su esposa, 1 de sus hijos y 3 nietos. Él es una de las personas que desde que se inició la cuarentena me envía casi que, a diario cadenas de oraciones, mensajes apocalípticos, falsas noticias sobre muertes y desastres mundiales ocasionados por el covid19.
No pregunten si estoy afligido
No pregunten si estoy afligido
Que motivo tiene mi dolor
El amor ha peleado conmigo
Y un hombre no vive sin amor
Consideren cuando ya hay un hijo
Que ha venido es en busca de amor (bis)
Últimamente se ha tornado un poco agresivo, casi nunca contesto esas cadenas y me quedo callado cuando lanza improperios, maldiciones y hasta sindicaciones criminales contra el presidente, la alcaldesa y el gobernador. Según él supuestamente los mandatarios propician las aglomeraciones y son complacientes con la gente que forma tumultos y no respetan la cuarentena.
Ya no es como hacer para verte feliz
Pon algo de tu parte
El mundo es tan pequeño, pero para ti,
Se hace un infierno grande
Pon un grano de arena que yo pongo dos
Te regalo los mares
De quererte por siempre será mi intención
Ay! cólmame de detalles
¡Oh qué sorpresa! El domingo en la mañana, una de sus allegadas, me hizo llegar una foto acompañada de queja. Alfredo Antonio se emparrandó y jugó dominó y cartas hasta altas horas de la noche en la esquina con un grupo de vecinos y visitantes de otros barrios. La quejosa me informó que eso es frecuente en Alfredo Antonio y los vecinos de la cuadra.
Cólmame de detalles, mi amor
Cólmame de detalles.
Que te quiero tu muy bien lo sabes
Que te quiero tu muy bien lo sabes
Que me quieres yo también lo sé
Pero es que la envidia es de los males
Que llevan este mundo a perder
¿Y si en esas reuniones prohibidas se desata un contagio masivo de virus será culpa de Duque, Caicedo o Virna? Ombe Alfredo Antonio, también tienes que poner algo de tu parte. No está bien buscar culpables para justificar nuestros errores. Inicialmente hazlo por ti, por tu salud, por la de los tuyos y por la sociedad. ¡Por favor, quédate en casa! Lo mismo pasa con Martha, Carmen, Cristina, Manuel, José y todos esos miles de insurrectos sociales que pululan por las calles, los parques y las esquinas, que no respetan el distanciamiento social… ¡Eche pongan algo de su parte, no todo puede ser el otro!
@LuisOnateGamez
La inocencia de muchos hogares
En las manos de quien menos crees (bis)
Si tú pones algo de tu parte
Si tú pones algo de tu parte
Más cadenas unirán nuestro amor
Verías si florecen los rosales
Y un alivio llena el corazón
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