De manera valiente y aferrada a Dios la joven comunicadora escribió en sus redes sociales los momentos de angustia, esperanza, zozobra, fe y tristeza vividos.
La Comunicadora Social-Periodista, estratega, locutora y emprendedora nacida en Aracataca Magdalena, pero formada profesionalmente en Santa Marta, con más de 35 mil seguidores en Twitter, comunicó con ‘valentía’ tal como reza en su perfil, los últimos momentos vividos por su padre Tomás Octavio Palma

Desde el pasado 21 de mayo con angustia Lina Palma comenzó a contar las penurias que vivía ella afuera y su padre dentro de la UCI. “Cehoca: Desde ayer en la mañana me dijeron que le harían diálisis a mi padre, hoy es sábado y nada. Él está súper hinchado. Qué tanto esperan para ordenar. Señalan que mañana, ¿Por qué? Su objetivo debe ser ayudar para mejorar condición no esperar más días para que siga empeorando”. Y agregaba en su hilo informativo
“Cómo es posible que desde ayer viernes en la mañana digan que le harán diálisis y salgan hoy con que mañana, todo un día perdido, mi papá cada vez más en deterioro, y ahora toda la noche, la madrugada sin la diálisis… qué triste todo esto”.
Al día siguiente contó la comunicadora que por fin había sido notificada por médico de turno de Cehoca que le ordenaron diálisis a su padre, sin embargo, el drama seguía. “Pasó la tarde del viernes, todo el día de hoy y nada. Y dicen que solo pueden mañana. Creatinina está en 8. ¡Qué esperan!” insistía Lina

Al tiempo que su angustia crecía Lina Palma, quien fuera por varios años la corresponsal desde Santa Marta de la W radio, se aferraba a su fe en Dios, “En un susurro escuché su voz y sentí su presencia. He clamado y me he arrodillado por la vida de mi padre y por todos los pacientes con Covid en el mundo. Lo seguiré haciendo. No desmayaré”, se leyó en su red.
Lo que iba pasando con su padre infectado por la pandemia del Covid-19, ella lo iba relatando, pero también iba a sus mejores recuerdos y mostró una foto cuando su padre la llevó al altar a de entregarla a su esposo Luis Guillermo ‘Memo’ Rubio, el hoy secretario de salud del departamento.

“Hoy recuerdo la última vez que nos vimos, dijo: Cuídate hija, que te vaya bien. Hoy abrazo los mejores recuerdos y todo lo bueno que viví a su lado. Hoy me aferro a lo bonito, al amor, a su lucha. y me quedo con eso. A tu forma de ser, sociable, buen sentido del humor… Noble”. Escrito que acompañó de una hermosa fotografía de su gran noche de boda al lado del señor Tomás.
Pero las noticias que rodeaban el estado de salud de su padre no eran alentadoras los estragos del Covid-19 eran letales. “Lamentablemente mi papá hizo sepsis, el riñón se dañó completamente, adicional a todo esto, cogió una bacteria no se donde. Me informaron que no aguantaba ni la diálisis. Esto es lo más duro que he vivido en mi vida. Cuiden y amen a sus papás”. Diría con valentía la emprendedora.
Cuando sentía que iba a desfallecer tomaba aire y se impulsaba cargada de esperanza y escribía. “Hoy es un día de esos donde los médicos te dicen NO. No hay posibilidades… solo me queda creer en un Dios que dice SÍ, sí hay posibilidades”. Los comentarios de aliento no se hacían esperar, la influencer tiene miles de seguidores que le admiran y respaldan sus posiciones, sean políticas o sociales y en un momento como este mucho más.
“Entrar a UCI me ha cambiado la vida. Dios mío qué fortaleza tienen los familiares que ingresan a ver a sus seres queridos y qué fuerza también tiene el personal médico”. Aquí sacaba su casta de periodista, dándole una mirada a la realidad que vive una ciudad en donde diariamente mueren varias personas al tiempo producto de la pandemia y en donde poco se admira y valora el esfuerzo del personal de salud que afronta con estoicismo la dura prueba a la que los somete el coronavirus.
“Un día más para sacar fuerza de lo más profundo de mi alma y transmitirle todo mi amor a mi papá”. Escribe con esperanza y agrega “Mil veces me voy a arrodillar. Mil veces voy a suplicar a Dios… quiero verte de nuevo. La Clínica informa que esta noche harán la diálisis. Espero y confío que así sea”. Remata con los ojos enjugados de lágrimas y de esperanza.

Llega el día 24 y escribe “Mientras haya vida hay esperanza. Me aferro al amor divino. Gracias por todos sus mensajes y todo el apoyo”. En verdad son miles los mensajes que tiene colgados en cada una de sus cuentas.
“Anoche dijeron: No resiste la diálisis, prepárate para lo peor… hoy amaneció vivo, ya le pusieron vasopresores porque su tensión arterial bajó. Y está sobreviviendo cada segundo con mucho esfuerzo. Dios tiene la última palabra”. Este mensaje hace temer lo peor, es cuando Lina Palma, toma fuerzas y vuelve a patentar su amor y confianza en Dios “Y aunque el mar se levante y una tormenta venga a mí. Yo seguiré creyendo en ti”.
Este martes 25 de mayo se ha conocido que el padre de Lina Palma a partido a un mejor lugar, ella guarda silencio, sus redes están de luto, no hay fuerza para escribir nada ni a nadie, su corazón está roto, se ha ido a quien admiraba como un todo y a quien elogió por darle tanto en este tiempo.
Paz en la tumba de Tomás Octavio Palma, quien le dio vida y guio a la valiente comunicadora social y periodista, la estratega, la locutora, emprendedora, esa que te dice con confianza “Te ayudo a comunicar mejor y con valentía”. La que todos los días escribe, discute, explora, debate, de ideas y propone. Esta triste y callada, dejemos que viva su luto en su propio silencio, de seguro los más de 35 mil seguidores la estarán esperando con los brazos abiertos y cargados de solidaridad.

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