*Este jueves 18 de mayo se cumplen nueve años de aquel domingo en el que, en el municipio de Fundación, un bus ardió en llamas con 33 niños y un adulto en su interior.

Ese día, ‘la esquina del progreso’ estuvo en el ojo del país entero. Era increíble de creer, como una imprudencia o desconocimiento de un conductor, había generado una conflagración que acabó con la alegría, los sueños y la vida de varias decenas de menores.

Como residente y líder de la sociedad fundanense Mallath Martínez vivió ese triste episodio que hoy recuerda con dolor y manifiesta otra vez su pesar a través de un comunicado a la opinión Pública

El primer punto de 6 de dicha publicación la exalcaldesa del municipio afirma. “Con profundo dolor y un recuerdo siempre vivo ante la ausencia de nuestros niños, hoy ángeles en el cielo, volvemos a expresar nuestro sentimiento de solidaridad para con sus familias y el pueblo fundanense”.

Más adelante la señora Martínez precandidata a la Gobernación por el movimiento significativo de ciudadanos Magdalena Tiene Futuro, dice “Este hecho vivirá en la memoria como un faro para trabajar de manera decidida y ejemplar en pro no solo de la niñez de nuestro pueblo, sino de todo el Magdalena”.

Un monumento se levantó en Fundación a fin de recordar por siempre el más triste episodio de todos los tiempos de este municipio//

En su tercer punto expresa. “Que el esfuerzo que hoy estamos haciendo poniendo a consideración de los magdalenenses nuestro nombre, tiene mucho que ver con la necesidad de construir un mejor Magdalena y con futuro, a partir de la seguridad alimentaria de nuestros niños en el colegio, de la protección de sus vidas y del acompañamiento social para que sean hombres y mujeres de bien”.

Consciente que un grueso número de fundanenses deposita en ella una esperanza de cambio Mallath ratifica. “Creemos ante el dolor de las familias de los 33 ángeles de Fundación, debe nacer un compromiso genuino para cuidar, velar y darle garantías de una mejor calidad de vida a los niños magdalenenses, a fin de recompensar en algo la ausencia de nuestros pequeños”.

Finalmente, como fiel creyente dice. “Volvemos a encender una vela para que brille la luz perpetúa de nuestros 33 angelitos y oremos a Dios para que descansen en paz. No los olvidamos porque ustedes viven en nuestro corazón”