“Jaime deja una silla vacía, pero queda una huella imborrable”: Pedro Gómez

Visiblemente afectado hasta el punto que sus palabras dichas   fueron mucho menos de las que en un principio quizás quería expresar, el presidente del Concejo Pedro Gómez Añez, despidió a su compañero de partido político, colega de bancada y amigo personal Jaime Linero Ladino.

En su condición presidió    la Sesión Ordinaria y Ceremonia Solemne en memoria de Jaime Alberto Linero Ladino, y después de varios actos como la entrega de símbolos a sus familiares tales como la bandera del partido ASI, la de Santa Marta, pergaminos con notas de estilo y placa de reconocimiento, fue Pedro Gómez quien inició las intervenciones en la plenaria semipresencial.

“Jaime fue un político, pero más que eso un gran familiar y un gran amigo, Jaime nos deja huellas imborrables no es fácil llegar a sesionar con una silla vacía, que en paz descanse mi compañero, colega y amigo”, dijo con voz entrecortada el presidente del Concejo.

Al abrirse el escenario de participación de los demás concejales, el segundo en hablar fue el primer vicepresidente Efraín Lozano, quien recordó que siempre vio en Jaime Linero a un maestro, y un hombre justo y brillante “A Jaimito como yo le decía,  nunca le regalaron nada, siempre lucho por las cosas, un hombre justo, hablar de él es hablar de un maestro que hizo todo por enseñarnos, en especial a mí, la ciudad pierde a un concejal extraordinario y su familia pierde a un pilar, trataremos de hacer un trabajo único para rendirle honor”

Alberto Socarras, uno de los mas callados concejales de este periodo se atrevió a tomar el micrófono y dijo que era un día triste “un amigo que se va y un amigo que recordaremos para siempre, escuchamos algunos de sus logros aquí hoy, pero faltaron otros, lo recordaremos permanentemente, Jaime siempre nos hizo reír y ese es el recuerdo precioso que me queda su alegría.

El liberal Iván Saravia, dijo que de todas las virtudes que destacaron de Jaime Linero él se quedaba, con lo estudioso, que no tragaba entero, “pero lo que más me marco a mi, fue su relación con sus hijos, siempre de la mano de su hijo mayor y su segunda hija, y luego verlo con su tercer retoño, era admirable ver ese cuadro de familia”.

Juan Andrés Ruiz, expresó que rescataba para perpetuar el gran ser humano, “a Dios le doy gracias que me permitiera estar al lado de Jaime, una amistad sincera, aunque no siempre estuviéramos de acuerdo en lo político, y eso es lo más grande, ver que todo lo hacía con amor, seamos como Jaime no perdamos el tiempo en cosas vanas, porque no sabemos cuándo nos vamos, Jaime no perdió el tiempo”.

Efraín Vargas y Carlos Robles, que dijeron estar en ese momento acompañando a su ultima morada a Olga Linero Montes, la hermana del concejal Álvaro Linero, señalaron de Jaime que fue un hombre genuino, “no solo pierde la familia de Jaime, sus amigos y compañeros, la ciudad pierde un líder nato y muy en distinto en el debate político hay que reconocer a Jaime como el analítico, el acucioso el estudioso.

Finalmente, compungido por el momento y el dolor de su amigo y familiar, el secretario general del concejo Darío Linero cerro las intervenciones sentando la frase

“Jaime fue un acto de FE, un hombre que le dio color a la VIDA”