Diego Alejandro Posada Orjuela, un sujeto del círculo íntimo del gobernador Carlos Caicedo Omar y la gerente del hospital de San Rafael, Diana Celedón Sánchez resultó ser un médico chimbo, falsificador y experto tramador.
Hoy en el municipio de Fundación, al norte del departamento no se habla de otras cosas, sino de la macondiana historia de un ‘médico’ que no era ‘medico’, pero que con su viveza no solo se ganó la confianza del gobernador Caicedo la gerente del hospital local, más de 250 millones de pesos, sino que hoy se sacan cuentas por ser el coordinador de la UCI intermedia del centro de salud a cuanta gente ha podido ayudar a morir víctima del Covid-19 y otros males.
Para la sociedad fundanense, la comunidad médica, y las directivas administrativas, Diego Alejandro Posada Orjuela, no era un médico, NO, era ¡El Médico!, un hombre curtido en las grandes ligas, intensivista graduado con honores de la prestigiosa Universidad de la Sabana en la capital de la República.
Pero como entre el cielo y la tierra no hay nada oculto, el reinado del afamado médico terminó en la calurosa Fundación y como en una novela de Kafka se descubrió que Diego Alejandro Posada Orjuela, no era ningún médico intensivista, ni nada por el estilo, es un ‘tegua’ ‘yerbatero profesional’ y en especial un gran contratista de esos de la historia negra, de la historia nuestro caballero.
Con el auspicio del gobernador Carlos Caicedo Omar, hombre que revisa todos los contratos de 150 mil pesos hacia arriba, la gerente del hospital de Fundación Diana Celedón Sánchez, (hija de nuestra querida profesora Karlina) ‘Dieguito’ durante ocho meses obtuvo contratos por 259 millones de pesos en su calidad de coordinador de la UCI intermedia, dichos contratos de acuerdo a los documentos fueron desde los 10 millones, pasando por 39 hasta 97 millones de pesos de un solo ‘meke’. Profesional absoluto de una trama capital.
Los muertos Fundación
En un gobierno como el de Carlos Eduardo Caicedo en donde el derroche de luces, escenografía, sonido, bailarinas, camisetas y los gritos de Eduardo Brito a todo pulmón diciendo ¡Ahí viene, ya está aquí, señoras y señores! Quizás esos 256 millones de pesos que se llevó Diego ‘el chimbo’ Posada, no sea nada, pero para decenas de familiares que les entregaron a sus enfermos a las manos de este hombre a fin de que le salvara la vida, sí que es mucho.
Solo en el mes de abril en Fundación en ese hospital, en esa sala de UCI, en manos de Diego Alejandro Posada Orjuela, murieron 55 ciudadanos, si sumamos los que fallecieron en 8 meses tiempo del poder de este hombre al frente de esa unidad, usted se desmaya.
Uno de los casos puntuales es el del líder social y exconcejal de El Retén Magdalena Gustavo Casalins quien entró caminando a esa UCI en manos del falso profesional de la medicina y salió grave y no le alcanzó el tiempo en Cartagena y murió.
“Me sorprende de sobremanera ese grado de irresponsabilidad de una gerente de un hospital de tanta importancia como es el San Rafael de Fundación para quienes vivimos en el norte del Magdalena, contrate sin verificar condiciones a personaje como este para tan grande responsabilidad” dijo el alcalde de El Retén Jorge Eliecer Serrano Casalins.
El mandatario agregó, “en lo personal voy a entablar acciones legales en contra del hospital de Fundación, la pérdida de mi tío Gustavo es algo irreparable y no hay nada que hacer para devolverle la vida, pero si vale la pena llevar esto hasta las últimas consecuencias en contra de quien sea responsable, sea la gerente, los jefes de área, o quien sea, pero vamos a hacer lo debido por dignidad, por respeto a la sociedad y de todas las familias que hoy lloran un ser querido”.
Para el alcalde de El Retén este escándalo tiene muchas miradas y uno de ellos es que cómo así que en el gobierno departamental a través de sus gerentes de hospital contrata sin verificar condiciones individuales, “no me cabe en la cabeza de que tengan desconocimientos de a quien contratan, porque hoy es muy fácil observar, indagar sobre la legalidad y trayectoria de un ciudadano o de un cuerpo médico, más cuando estamos hablando de entregar vidas humanas para el cuidado de esas personas y hoy me entero que a mi tío se lo entregué fue a un falsificador y experto contratista violador de la ley”.
El tema es tan delicado que son varios los interrogantes que nacen a partir de este nuevo escándalo del gobierno ‘del cambio’ y que el periodista Rubén Peña Noriega los hace de manera acertada en una publicación del medio El Artículo: ¿De dónde salió este falso médico? ¿Quién dio la orden que lo contrataran para montar y coordinar la UCI Intermedia de la ESE Hospital San Rafael? ¿Quién verifica la idoneidad de los contratistas del hospital y en el caso particular de este contratista hubo algún funcionario que verifica y confirma su idoneidad? ¿No hay recurso humano (médico intensivista) en el Magdalena que pudiera cubrir esa necesidad en la ESE Hospital San Rafael? Y unas preguntas más delicadas ¿Quién certifica que a los pacientes que fueron atendidos en esa UCI Intermedia, sobre todos los infectados con Covid19, se le haya aplicado el tratamiento correspondiente? O peor aún, ¿Y de los fallecidos por Covid19, luego de haber pasado por la UCI Intermedia del hospital San Rafael, ¿qué?
Hoy cuando en Fundación, rige el mismo calor de ayer, se quieren respuestas, a tanto dolor entre familiares y engaño para la sociedad, el bisturí está en manos del gobernador Carlos Eduardo Caicedo y la distinguida gerente Diana Celedón, la hija de la profe Karlina Sánchez.