Los muchachos envalentonados, los mismo que escuchan las canciones vulgares del reguetón y perrean y perrean, ayer se les dio por pasar por la sede de Coomeva ubicada en la esquina frente al CC Ocean Mall y levantarla a piedras, rompieron sus vidrios, avanzaron hacia la Troncal del Caribe y al llegar al semáforo de la Ferrocarril que lleva a la Universidad del Magdalena, destruyeron el semáforo y orondos fueron a parar a la rotonda de Mamatoco, en donde hicieron fogatas y generaron el pánico, ahí gritaron, arengaron y muchos ni si quiera, saben porque.
Quien sí sabe lo que hace es la pandemia del coronavirus, que de manera silenciosa sigue su paso asesino en el territorio y solo ayer se llevó de este mundo a 28 personas, de las cuales 21 fueron en la ciudad de Santa Marta.
Mientras políticos, sindicalistas, ciudadanos buenos y malos se reúnen para protestar gritar, tirar piedras y encender fuego, la pandemia sigue en su tercer pico haciendo de las suyas y en materia de contagios la cosa siguió por lo alto y en Santa Marta 406 personas más ya están contagiadas, mientras que en el resto del departamento 81.
Las víctimas de la pandemia se concentraron 21 en Santa Marta, 4 en Fundación, 2 en Guamal y una en Ariguaní, en materia de protestas y actos vandálicos todo se concentra en Santa Marta, por lo tanto, también habrá resultados de las aglomeraciones en las próximas horas o días, al final este pico asesino no tiene fecha ni hora en el calendario para aparecer con su manto de contagio y muerte.
