En el corregimiento Isla de Cataquita municipio de Puebloviejo, aún retumban los recuerdos de las acciones violentas de los grupos paramilitares, allí fueron muchas las acciones violentas cuando el poder del terror era el que predominaba.
Hernán Villamil Ávila, recuerda por ejemplo que el 29 de mayo del año 2000 le toco huir con su familia y dejar el ‘pedazo’ de tierra solo, porque había dos elecciones, quedarse y morir o huir y vivir.
Cuenta el campesino que han pasado 21 años y ellos proceso tras proceso, acción tras acción y gracias al acuerdo de pasa y la rendición de las autodefensas pudieron regresar a su tierrita, “aquí habíamos dejado 8 hectáreas de tierra, regresamos con esperanza y fe para poder empezar de nuevo.
Pero la felicidad ha durado muy poco, en las ultimas horas asegura Hernán que cuatro hombres que según él son paramilitares a ordenes de un patrón llegaron y destruyeron una casita de bareque y palma construida, pero lo mas grave dice que también fueron respaldados por la Policía.
“Tenemos los papeles de nuestra tierra, tenemos la escritura y la policía llega a desalojarnos de manera violenta, junto a estos hombres armados, a mi hermano le pegaron un tiro en la pierna izquierda y nos dicen que si no nos vamos nos matan”, afirma el campesino.
