Por: Jorge Luis Hernández – Edgar Salas

*Mañana martes 31 de enero serán sepultados los jóvenes Carlos Villalobos Gutiérrez y Junior Maldonado Altahona, quienes murieron trágicamente en un accidente de motocicleta en una calle de Fundación.

En Consejo de Seguridad convocado por el gobierno departamental, el alcalde Checho Serrano, pidió verdad y justicia, frente al caso de José David Carrillo Chamorro//

El pasado miércoles 25 de enero de este 2023, la comunidad retenera se enteró que, tras un procedimiento policial, terminó muriendo el joven José David Carrillo Chamorro, a partir de allí el pueblo rompió su tranquilidad, por dos días hubo disturbios y hoy familiares, amigos, vecinos y la sociedad retenera reclama verdad y justicia. Horas después del suceso del hijo de la señora María Luisa, se conoció de la infausta muerte de Deiber Escorcia Pertuz, un destacado ingeniero de sistemas, hijo del apreciado docente Amilkar Escorcia, Deibir fue atacado por un cáncer mortal.

Dos días después se enteró el pueblo de la muerte del ‘campesino de oro’ Gilberto Villarreal Pinzón, enfermedades de base le terminaron provocando un paro cardiaco, “tres muertes ya son suficiente para mi pueblo”, escribió en Facebook una dama residente, pero que va, faltaba otra terrible noticia y al quinto día de dolor, en la madrugada del domingo (4:40 am) al perder el control de su motocicleta que iba a gran velocidad terminaron muriendo sus ocupantes, Carlitos Villabolos y Junior Maldonado el Jonky. La tristeza se explaya por El Retén, jamás se había vivido tanto dolor.         

Y es que ante el suceso nos regresa a la memoria muchos episodios contados y otros vividos conversando con el licenciado magíster y rector de la IED San Juan Bautista, Jorge Luis Hernández Arrieta, nos damos cuenta que nuestra historia, ha tenido duros momentos, pero ninguno en donde 5 hijos del pueblo durante 5 días dejaron de existir.

Un golpe tras otro golpe, durante 5 días a recibido la familia retenera, 5 de sus hijos en distintas circunstancias han muerto//

Un Diciembre Negro

En 1964, cuando El Retén era un corregimiento con ganas de progresar y vivía la   celebración de la Navidad con alegría y alborozo. El   25 de diciembre, dos entrañables amigos, miembros de dos familias muy apreciadas en el pueblo: Plácido Vanstrahlen Díaz y Nasser Yubrán, celebraban de una manera muy particular esta navidad; en vez de asistir a las fiestas familiares o populares, como era la costumbre se dirigieron a la gallera, ambos llevaron sendos buenos gallos de pelea, el destino quiso que los dos amigos, que como cosa curiosa ese día, a las dos de la tarde habían almorzado juntos en casa de los Vanstrahlen, casaron sus gallos  e hicieron las consabidas apuestas y se inició la riña. El gallo de ‘Placidito’, como cariñosamente lo llamaban sus amigos, venció en franca lid al gallo de Nasser. Los ganadores, como es natural, celebraron el triunfo y los perdedores se lamentaron y buscaron las excusas del caso.

Un amigo de Plácido llamado Juan Marriaga y apodado “Juancho Mula” lo invitó a tomarse unos tragos en la cantina de ‘La Negra de la Cruz. Allí se encontraba Nasser, muy molesto por haber perdido la apuesta y su gallo, al ver a Placido se le acercó y le rompió la camisa, hecho que era y es costumbre entre amigos en las parrandas de esta población. Por esta razón Plácido hizo caso omiso de lo acontecido y decidió regresar a casa a buscar otra camisa, pero Juan Marriaga le insistió en que debía cobrar la camisa, pero que no la cobrará en plata, sino que pidiera una botella de ron, para seguir la parranda.

Siendo la una de la madrugada, Juan Marriaga insistió tanto que Plácido decidió buscar a Nasser para cobrarle la camisa, se encontraron en casa de unos amigos (carrera 8 con calle 7, segunda casa),  allí lo esperaba Nasser que al verlo pensó que Plácido procedería contra él y semiescondido en una paredilla contigua al lugar, le disparó, dejándolo sin vida en el instante, sin darle oportunidad de defenderse, al cabo que no podía hacerlo ya que Plácido solo llevaba consigo una moneda de 10 centavos y un pañuelo blanco, así lo comprobaron los agentes del DAS en el momento del levantamiento del cadáver.

No habían pasado 10 minutos del suceso cuando varias personas fueron a dar aviso del caso a las familias afectadas en el hecho, fue entonces cuando Enrique Vanstrahlen, hermano mayor de Plácido, al saber la noticia, en medio de la ira y el intenso dolor, tomó un revólver y se dirigió a la casa de los Yubrán. Cuando llegó llamó a la puerta y preguntó por Nasser, el cual como es obvio, no se encontraba en el lugar, pero en cambio sí estaba su hermano Jader, quien sorprendido salió a la puerta, Enrique se adelantó y disparó contra Jader, quien falleció en el instante.

Fue así como una simple riña de gallos dio origen a la muerte de dos jóvenes amigos, muy apreciados en la población en aquella nefasta noche de un mes de diciembre de 1964. La vida da sus sorpresas y casi cuarenta años después un sobrino de Plácido se casa con una sobrina de Nasser y hoy ese rencor que otrora los separaba es reemplazado por los vínculos de familiaridad y el amor.

Juan Barrios Hernández, dejó una huella imborrable en la sociedad retenera, su accidente en motocicleta regresa a la mente luego de conocerse la dolorosa partida de dos jóvenes//

La muerte de Juancho y Omaira

Seguimos recordando y se nos viene a la mente aquel 11 de septiembre del año 2003, cuando provenientes de Aracataca en motocicleta, Juan Barrios Hernández, considerado el más prolífico y excepcional docente de todos los tiempos de El Retén y la profesora Omaira Luz Ibáñez Romero, se accidentan contra un camión, fue tan violento el choque que ambos murieron en el lugar. El Retén perdió ese día a dos de sus mejores ciudadanos y ese hecho jamás ha sido olvidado.

El dolor por varias muertes ha tocado el corazón del pueblo y las lágrimas se han agotado, el corazón se laceró ante la decisión de José Gregorio Vanstrahlen Contreras de quitarse la vida en plena juventud, había nacido 20 de diciembre de 1976, hijo de Enrique Vanstrahlen Díaz y Francia Helena Contreras. Tenía una gran vocación por el arte y especial por la música junto a su inseparable amiga Marinella Ballesteros conformó un dúo musical al cual llamaron “Grupo Corrientes” en este mismo año participaron en la Semana Cultural de Aracataca y ocuparon el primer puesto con el tema “Canción a la vida” de la autoría de los dos, luego ganaron otros premios, antes de su terrible decisión en el año 1996 dan a conocer el testimonio de su grandeza musical. El himno del municipio de El Retén, el cual titularon “Tierra de gloria”. Pero tristemente el 21 de julio de 1999 por razones inciertas decide suicidarse entró al sueño de lo eterno por razones inciertas y nos dejó sin su música, sin sus sueños, sin su sonrisa amable, sin su candidez de persona afable.

Este camino también lo tomó Álvaro Barros Barceló quien con una escopeta hechiza se quitó la vida, ‘La Picúa’ lo hizo con una cuerda, mientras que también se recuerda el momento triste en donde tres hijos de Amado Moreno murieron en el área rural ante la caída de una avioneta que llegó desde los aires a acabar con sus vidas.

Jorge Hernández con quien a cuatro manos se hace este escrito, en la foto con Wilson Díaz Palma, otra de las perdidas del pueblo//

En un pueblo caracterizado por su paz espiritual y su alegría que contagia en donde se hace historia diciendo ‘El Retén, retiene’ y donde muchos forasteros llegaron para quedarse y hacer familia, la partida de hijos de manera violenta a arrugado el corazón de mucha gente, la muerte Neter Teran, Rujero Teran, Edilberto Rudas, Manuel Pérez Ballesteros, Samuel Quevedo, Wilson Díaz Palma, Tino Ferrer son algunos de esos seres que extrañamos.

Cuando hoy lloramos la muy pronta partida de Carlitos el hijo de ese buen hombre como es Carlos Villalobos y su Sugeidis Gutiérrez, y de Junior Maldonado Altahona, también se recuerda que en una motocicleta murió Raúl Montoya, como también que aun extrañamos y nos duele la repentina muerte de Jairo Vega Ospino y Ramón Madero Cervantes. El pueblo recuerda a quienes le dieron alegría a partir del baile y la tambora entonces en un día como hoy se añora aquellos tiempos de fiesta y fútbol con Andrés, Miguel, Maritza, Ledis, Jazmín y Ángel Lanceros Salcedo y el gran Víctor Barrios ‘La tanga’.   

El Retén siempre ha sido un pueblo fuerte que enfrenta las vicisitudes y las dificultades, por eso en época de pandemia soportó con estoicismo la muerte del líder del pueblo Gustavo Casalins, los profesores Teresa Quiñones, Luis Eduardo Ortiz Quevedo ‘Lucho pinguita’, Pedro ‘Pello’ López, el rector José Antonio Llanos y por supuesto al abuelo de Carlitos, el mecánico del pueblo Cesar Villalobos.

Consternación en El Retén también causó la muerte Jonathan David Alcázar, el joven patrullero de la Policía Nacional, que se accidentó en una motocicleta cuando de Antioquía iba en busca de su familia en Valledupar, el hijo de Digno popular ‘Manteco’//

Seguiremos recordando a nuestros muertos, y también reflexionando de qué debemos hacer para que donde estén se sientan orgullosos de lo que seguimos haciendo en la tierra.